Child of the light

Child of the light
Jackson 5

jueves, 17 de junio de 2010

Child of the light cap 8

Michael miraba a Marlon con admiración.

-¡Marlon! ¿Tú sí me crees?-

Marlon sacó el montón de revistas que había estado leyendo en esos últimos días, hojeó una de ellas y al encontrar una página en particular, se la enseñó a su hermano.

-¡Mira! Aquí dice que un sujeto logró grabar en cinta magnética la voz de un fantasma, un tal Ray Class o algo así, grabó a un espíritu del más allá diciendo “eres un hombre bueno” y además, ¿recuerdas la casa de la abuela, cuando fuimos aquel fin de año? ¿La puerta que se cerraba sola?- Michael asintió, aunque la verdad, nunca le tocó ver la dichosa puerta.- Eso quiere decir que los fantasmas existen, ¿por qué no habría de estar uno siguiéndote ahora?-

-¡Gracias!- Michael se abalanzó para abrazar a su hermano, totalmente agradecido.-Ahora, dime, ¿Qué dice?- Inquirió Marlon con curiosidad.

-Su nombre es James Thompson, vive… digo, vivía en Harlem, Nueva York. Lo mataron y su familia no sabe nada.-

-Según la vidente Marina LaRae.- Decía Marlon, buscando en otra de las revistas.- Los fantasmas que hablan con la gente necesitan ayuda para pasar al otro mundo, se acercan a las personas que pueden verlos y oírlos para pedirles que hagan cosas por ellos.-

-Él quiere que le avise a su familia.-

Marlon se mordió el labio.-Eso está difícil.-

-Es lo mismo que le dije.-

-La forma más fácil sería si supieran que pasó con mi cuerpo.- Intervino Jimmy. Michael le miró con sorpresa.

-¡Eso es aun más difícil!-

Marlon miró a Michael con ansiedad.

-¡¿Te dijo algo más?! ¡¿Está aquí ahora?!-

-Sí, y quiere que averigüemos dónde está su cuerpo.-

-¡Viejo! Eso está más difícil.- Dijo Marlon hacia el sillón dónde se hallaba Jimmy, ya que ahí era a donde Michael se dirigía cuando hablaba con el fantasma.

Jackie miró a sus dos hermanitos y rió por lo bajo, enternecido; en cierto modo le daba gusto que los niños tuvieran un “juego” (por muy raro que este fuera) para distraerse durante las largas jornadas de trabajo.

-Niños, el desayuno llegó. Dejen a su amigo fantasma y vengan a comer.- Ordenó Jackie. Marlon y Michael le miraron.

-Ahora vamos.- Murmuró Marlon. Michael echó una ojeada a Jimmy, el fantasma le hizo un ademán con la mano.

-Ve, hablaremos después.-

Los cinco chicos comenzaron a desayunar. Marlon y Michael se hallaban muy calladitos y pensativos, cosa que extrañó a Suzanne, quien después de terminar algunos pendientes, había llegado para desayunar con ellos.

-¿Qué les pasa?- Le preguntó por lo bajo a Jackie. El aludido, al verlos, sonrió.

-Tienen un nuevo juego.-

-¿Un juego nuevo?- Inquirió Suzanne, extrañada.- ¿De qué se trata?-

-Un amigo imaginario.- Replicó Jackie.

-Pero no es cualquier amigo imaginario.- Intervino Tito- Es un fantasma.-

-¿Un fantasma?, ¡Vaya jueguito!-

-Bueno, de hecho no es la primera vez que tienen un juego como ese.- Dijo Jackie, haciendo memoria.- Michael ya había tenido un amigo imaginario antes, ¿Recuerdas, Tito?-

Tito pensó por unos segundos, cuando después dijo.

-¡Ah, sí! ¡Aquella amiguita!- Suzanne miró a Tito y luego a Jackie, con curiosidad.

-Era una niña de su misma edad, en ese entonces Michael tenía cuatro años, decía que se llamaba Aisha y que jugaba con él casi todos los días.-

-Sí, pero era una amiga muy accidentada, siempre venía golpeada.-

-¿En verdad? ¡Qué increíble!- Repuso Suzanne.- Creí que estando rodeado de hermanos lo que menos tendría Michael sería amigos imaginarios.-

-Bueno, él era el más chico de la familia, está bien que Randy ya había nacido, pero apenas tenía un año y en cierto modo, creo que se sentía solo por que los demás teníamos otro tipo de juegos más rudos y otros intereses.-

-Bueno, pero ¿acaso no te parece rudo imaginar a una amiguita golpeada?- Dijo Suzanne, pero luego guardó silencio, la mirada de Jackie era muy elocuente. Era cierto,¿Qué tipo de amiga podría imaginar un niño como Michael con un padre como el que tenía?- ¿Y qué pasó con Aisha?-

-Con el tiempo dejó de venir. Michael dijo que se había asustado por culpa de Joseph.-

-Sí, lo recuerdo.- Dijo Tito.- ¡Vaya día ese que se fue Aisha! Michael le reclamó a Joseph, le gritó que por su culpa se había ido su amiga, que por sus gritos la había asustado.-

-Sí… y Joseph se enojó mucho… ese día lo…- Jackie no siguió, prefirió meterse un bocado de tocineta en la boca, pero nuevamente su silencio había sido más elocuente que el más versado de los discursos.

-Bueno, creo que el tener a este amigo le hará bien,- Dijo la joven tratando de sonreír despreocupada.- Bien, después del desayuno quiero que se preparen, por que volamos directo a Chicago, no lo olviden.-

-Sí, Suzanne.-

Tras desayunar, los chicos y su comitiva salieron del hotel con rumbo al aeropuerto, rápida y calladamente, sin oportunidad de hablar a solas, Marlon y Michael siguieron a todos sin poder continuar con su conferencia sobre el asunto de Jimmy.

En solo unas horas llegaron a Chicago, siendo recibidos por otra horda de fans emocionados. Como el concierto era ese mismo día, se siguió el itinerario de Detroit, es decir, llegaron al hotel, ensayaron unas horas y se dirigieron al lugar del concierto, el cual fue tan frenético como el de las ciudades anteriores.

Tras otra noche de duro trabajo, los chicos llegaron al hotel, exhaustos. Suzanne los reunió en una habitación para que cenaran algo antes de ir a la cama.

-¡Hey, Michael!- Marlon se acercó a su hermano.- Creo que ya sé qué podemos hacer.-

Michael le escuchaba con interés, a lo igual que Jimmy.

-¿En verdad?- Preguntaron ambos a la vez.- ¿Qué?-

-Llamemos a la policía de Nueva York y digámosles lo que le pasó a Jimmy.- Los ojos de Michael brillaban de alegría.

-¡Esa es una buena idea!- corrió hacia el teléfono que se hallaba en la habitación, seguido de Marlon. Jimmy se acercó también.- Jimmy, ¿recuerdas dónde estabas cuando pasó… eso?- El fantasma hizo memoria.

-Un viejo almacén entre la 29 y Hudson. Pero mi cuerpo ya no ha de estar ahí.-

-¿Qué dice?- Inquirió Marlon.-Cree que su cuerpo ya no está en dónde murió. Pero vale la pena intentar, si ya no está quizá es por que la policía ya te encontró y tu familia ya lo sabe.- Dijo Michael al joven, para tomar luego el aparato.- Hey, Marlon, ¿sabes cuál es el número de la policía de Nueva York?-Marlon se quedó helado, no había contado con ese pequeño detalle. Después el rostro se le iluminó.

-¡La guía telefónica!- Ambos niños se abalanzaron sobre el libro, buscando con vehemencia.

-¿Qué hacen? ¿Otra broma telefónica?- Preguntó Jermaine al verlos.

-¡Ayudamos a Jimmy!- Contestaron los dos al mismo tiempo, sin dejar de buscar.

-¡¿De qué diablos hablan?! ¡¿Qué hacen con la guía telefónica?!- gruñó Joseph entrando a la habitación. Michael y Marlon se quedaron quietos y sin saber qué hacer.-¿Y quién diablos es Jimmy?-

1 comentario:

Anónimo dijo...

que hermosos estos chicos
tratando de ayudar a Jimmy..
Michael haciendo el bien siempre
y ahora su hermano le cree
pero ese Josephh!!! ay noo que no les aguade la ayuda que le pueden dar..
sigue con el siguiente.. ese joseph les va a decir algo que creo no me gustara!!!
saludos
LIZ